Hoy he estado a punto de hablarte.
Después de 2 semanas.
De 11 veces.
He estado a punto de hablarte.
No sé como llevar esto, no sé si llegaré hasta el final, no sé si hay un final.
Lo único que sé es que te echo de menos y que cada día me duele más estar sin tí.
Nunca olvidaré esa noche.
Te llamé.
Tantas veces.
Apagaste el teléfono.
Me dejaste.
Te fuiste.
Me abandonaste.
Se me para el tiempo al encontrar tus ojos.
Me devuelven la mirada, sorprendidos.
Sonrío al pensar la suerte que tengo,
¿por qué yo?
Podría ser cualquiera.
Mejor, peor, igual, diferente.
Pero no, aquí estamos, tú y yo.
No soy quien para discutir tu decisión.
No soy quien para decir si te estás equivocando o no.
Miles de errores.
Miles de defectos.
Y aquí sigues.
Devolviéndome la mirada.
Frunciendo ese ceño tuyo, de esa manera que sólo tú haces.
Y, en todo este instante, pienso.
Pienso en la fortuna.
En el azar.
¿Cómo haces que con sólo una mirada me asalte todo esto?
"Father.
Smith.
Warrior.
Mother.
Maiden.
Crone.
Stranger.
"I am hers,
and she is mine,
from this day,
until the end of my days."
11 veces te elegiría.
11 veces, cada día.
11 veces, cada mes.
11 veces, cada año.
11 veces, cada vida.
